Audita tus propias Redes Sociales
Llevar a cabo una auditoría de redes sociales te ayuda a evaluar qué tipo de contenido funcionan en tus redes sociales.

Evalúa tus esfuerzos
Si ya estás usando herramientas en tus redes sociales, necesitas tomar un paso atrás y ver las metas que ya has alcanzado. Hazte las siguientes preguntas:
- ¿Qué funciona?
- ¿Qué no funciona?
- ¿Quiénes se están conectando contigo en las redes sociales?
- ¿Cuáles redes sociales son utilizadas por tu mercado objetivo?
- ¿Cómo se compara tu presencia en las redes sociales con la de tus competidores?
Una vez que evalúes toda esta información, tendrás un buen punto de partida para planear cómo mejorar tus resultados.
Tu auditoría debería darte una idea clara del propósito que cada una de tus redes sociales tiene. Si el propósito de la cuenta no es claro, considera si vale la pena tenerla. Puede que sea una cuenta valiosa que solo necesita una redirección de estrategia o quizá una cuenta obsoleta que ya no vale la pena tener.
Para ayudarte a decidir, pregúntate lo siguiente:
- ¿Es aquí donde está mi audiencia?
- En caso de que así sea, ¿Cómo están usando esta plataforma?
- ¿Puedo usar esta cuenta a la hora de alcanzar metas significativas
- para mi negocio?
Hacerte este tipo de preguntas ahora, te ayudará a mantener en marcha tu estrategia de redes sociales mientras que sigues aumentando tu presencia digital.
Busca cuentas falsas
Durante tu proceso de auditoría, podrías encontrar cuentas fraudulentas usando el nombre de tu negocio o incluso los nombres de tus productos, queremos decir, cuentas que ni tú ni tu negocio manejan. Estas cuentas falsas pueden dañar tu marca (así como también atrapar seguidores que deberían ser tuyos), por lo que deberías asegurarte de reportarlas. Podrías verificar tus cuentas en las redes sociales para asegurarte de que tus fanáticos y seguidores sepan que están interactuando con la compañía real.
Es una practica muy extendida, yo lo hago, recomendar el estudio de la competencia, como modelo de referencia de hacia dónde queremos ir, qué dirección tomar, pero por ello no hay que descuidar nuestra propia identidad, por tanto tan importante es conocer a tus competidores, como a ti mismo, saber y profundizar sobre tus fortalezas y debilidades, para plantar cara a los retos del mercado.